Utilizan quirófano ambulante para castrar perros y gatos
Un nuevo quirófano equipado para castrar perros y gatos callejeros y domésticos comenzó a recorrer el Conurbano con el fin de contribuir a que cada vez menos mascotas deambulen por la calle, hecho que constituye, además, un riesgo sanitario. Al mismo tiempo, el ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires profundizó la campaña de vacunación antirrábica que se realiza cada año, con el objetivo de llegar al millón de dosis aplicadas.
Se estima que en nuestro país la población canina promedio es de 1 cada 3 habitantes y que alrededor del 80% de los argentinos tiene perros o gatos en su casa. Castrar a las mascotas de ambos sexos a temprana edad es el único método de control poblacional de los perros y los gatos a largo plazo, explicó el ministro de Salud, Alejandro Collia, al tiempo que señaló: Por eso, y para evitar cualquier consecuencia de índole sanitaria nuestra propuesta es hacerlo de manera masiva, gratuita y sostenida en el tiempo.
El quirófano móvil fue inaugurado la semana pasada en Tres de Febrero y a partir de febrero empezará a recorrer otros distritos del Conurbano en articulación con las autoridades sanitarias municipales. Esta unidad está totalmente equipada y cuenta con instrumental quirúrgico y varios quirófanos para poder realizar más de una cirugía a la vez, así como también tiene equipos de anestesia, zona de recuperación, baños y aire acondicionado.
El objetivo de este móvil complementario es reforzar el trabajo que vienen haciendo los municipios junto a las ONG's protectoras de animales, dijo el director de Atención Primaria de la Salud , Luis Crovetto, a cargo de la iniciativa, al tiempo que exhortó a la población a realizar una tenencia responsable de las mascotas para evitar enfermedades.
¿Por qué castrar?
El responsable de Zoonosis Urbanas del ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Simón, explicó que el objetivo de castrar a los animales tiene dos fines: uno es disminuir el vagabundeo, así como también evitar que los animales tengan enfermedades uterinas y en testículos; y el otro, evitar el contagio de enfermedades en humanos, propiciadas por la falta de higiene de los callejeros y en ocasiones, transmitidas por sus heces.
Los veterinarios sugieren que lo ideal antes de la cirugía es que la mascota no beba agua ni ingiera ningún tipo de alimentos por lo menos desde la noche anterior al turno, así como también es importante llevar una manta para retirarlo después de la operación. Una vez finalizada la intervención, el animal debe usar un collar isabelino para evitar que se toque la herida y complique su recuperación, que se complementa limpiando la herida con agua oxigenada periódicamente.
Campaña de vacunación
Si bien en la Provincia no se registran casos de rabia en humanos desde 1981 y de perro a perro desde 1984, las autoridades sanitarias insisten en la necesidad de vacunar una vez por año a las mascotas para prevenir esta enfermedad y evitar así la transmisión a las personas, hecho que no se produce desde hace 33 años en territorio bonaerense.
Por eso, en el marco del Programa provincial para el control de la rabia, y por cuarto año consecutivo, el ministerio de Salud inició una campaña de vacunación antirrábica, que se profundiza al finalizar el año, con el objetivo de aplicar un millón de dosis, tal cual ocurrió en las otras temporadas. La rabia es una enfermedad viral que afecta fundamentalmente al sistema nervioso, y sin tratamiento oportuno es mortal en el cien por ciento de los casos en humanos y animales, indicó Crovetto. Se transmite a través de la mordedura, lamedura o arañazos de animales mamíferos portadores del virus.
La Provincia cuenta con el mayor productor público de vacuna antirrábica del País que es el Instituto Biológico Tomás Perón, que funciona en La Plata , con un promedio anual de 120.000 inmunizaciones de uso humano, y 1.000.000 de uso veterinario. Asimismo, cuenta con un laboratorio para diagnóstico de primer nivel.
Cada año se procesan en el laboratorio de Zoonosis Urbanas mas de 21.000 muestras con resultado negativo en los últimos 10 años, manteniendo adecuadas medidas de prevención y observación antirrábica de caninos y felinos (registrándose más de 65.000 consultas por año debido a mordeduras) y con permanentes acciones de educación en la tenencia responsable de los animales.
La campaña pone énfasis en zonas donde puede haber mayores riesgos, y para eso se trabaja con la delimitación que realiza cada municipio, así como también se profundiza en terminales de ómnibus, o donde se producen desplazamientos permanentes, para evitar que la rabia ingrese de otros lugares donde circula con mayor frecuencia, explicó Daniel Simón.
Se estima que en nuestro país la población canina promedio es de 1 cada 3 habitantes y que alrededor del 80% de los argentinos tiene perros o gatos en su casa. Castrar a las mascotas de ambos sexos a temprana edad es el único método de control poblacional de los perros y los gatos a largo plazo, explicó el ministro de Salud, Alejandro Collia, al tiempo que señaló: Por eso, y para evitar cualquier consecuencia de índole sanitaria nuestra propuesta es hacerlo de manera masiva, gratuita y sostenida en el tiempo.
El quirófano móvil fue inaugurado la semana pasada en Tres de Febrero y a partir de febrero empezará a recorrer otros distritos del Conurbano en articulación con las autoridades sanitarias municipales. Esta unidad está totalmente equipada y cuenta con instrumental quirúrgico y varios quirófanos para poder realizar más de una cirugía a la vez, así como también tiene equipos de anestesia, zona de recuperación, baños y aire acondicionado.
El objetivo de este móvil complementario es reforzar el trabajo que vienen haciendo los municipios junto a las ONG's protectoras de animales, dijo el director de Atención Primaria de la Salud , Luis Crovetto, a cargo de la iniciativa, al tiempo que exhortó a la población a realizar una tenencia responsable de las mascotas para evitar enfermedades.
¿Por qué castrar?
El responsable de Zoonosis Urbanas del ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires, Daniel Simón, explicó que el objetivo de castrar a los animales tiene dos fines: uno es disminuir el vagabundeo, así como también evitar que los animales tengan enfermedades uterinas y en testículos; y el otro, evitar el contagio de enfermedades en humanos, propiciadas por la falta de higiene de los callejeros y en ocasiones, transmitidas por sus heces.
Los veterinarios sugieren que lo ideal antes de la cirugía es que la mascota no beba agua ni ingiera ningún tipo de alimentos por lo menos desde la noche anterior al turno, así como también es importante llevar una manta para retirarlo después de la operación. Una vez finalizada la intervención, el animal debe usar un collar isabelino para evitar que se toque la herida y complique su recuperación, que se complementa limpiando la herida con agua oxigenada periódicamente.
Campaña de vacunación
Si bien en la Provincia no se registran casos de rabia en humanos desde 1981 y de perro a perro desde 1984, las autoridades sanitarias insisten en la necesidad de vacunar una vez por año a las mascotas para prevenir esta enfermedad y evitar así la transmisión a las personas, hecho que no se produce desde hace 33 años en territorio bonaerense.
Por eso, en el marco del Programa provincial para el control de la rabia, y por cuarto año consecutivo, el ministerio de Salud inició una campaña de vacunación antirrábica, que se profundiza al finalizar el año, con el objetivo de aplicar un millón de dosis, tal cual ocurrió en las otras temporadas. La rabia es una enfermedad viral que afecta fundamentalmente al sistema nervioso, y sin tratamiento oportuno es mortal en el cien por ciento de los casos en humanos y animales, indicó Crovetto. Se transmite a través de la mordedura, lamedura o arañazos de animales mamíferos portadores del virus.
La Provincia cuenta con el mayor productor público de vacuna antirrábica del País que es el Instituto Biológico Tomás Perón, que funciona en La Plata , con un promedio anual de 120.000 inmunizaciones de uso humano, y 1.000.000 de uso veterinario. Asimismo, cuenta con un laboratorio para diagnóstico de primer nivel.
Cada año se procesan en el laboratorio de Zoonosis Urbanas mas de 21.000 muestras con resultado negativo en los últimos 10 años, manteniendo adecuadas medidas de prevención y observación antirrábica de caninos y felinos (registrándose más de 65.000 consultas por año debido a mordeduras) y con permanentes acciones de educación en la tenencia responsable de los animales.
La campaña pone énfasis en zonas donde puede haber mayores riesgos, y para eso se trabaja con la delimitación que realiza cada municipio, así como también se profundiza en terminales de ómnibus, o donde se producen desplazamientos permanentes, para evitar que la rabia ingrese de otros lugares donde circula con mayor frecuencia, explicó Daniel Simón.
