Día Mundial del Sueño 2016 bajo el lema: Dormir bien es un sueño alcanzable

El Día Mundial del Sueño (18-03) es una convocatoria organizada por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (WASM), que comenzó hace más de una década procurando concientizar sobre un problema que incide directamente sobre nuestra salud y calidad de vida, y que por si fuera poco, está en aumento en todo el mundo.
Se estima que hasta el 45% de la población mundial tiene algún problema relacionado con el sueño que afecta su buen dormir y su descanso, ante lo que promover la prevención, la educación y una mejor comprensión de estos trastornos es vital para todos.
La campaña Dormir bien es un sueño alcanzable, prioriza en todo sentido que volver a tener un descanso reparador no es algo ni remotamente imposible y que muy por el contrario, los especialistas entienden que si bien los trastornos de sueño tienen una alta prevalencia, son tratables en la mayoría de los casos.
En la casi totalidad de los países de Occidente, un 30% de la población consultará en algún momento de su vida por un trastorno de sueño (insomnio, síndrome de apnea del sueño, piernas inquietas, sonambulismo, etc), y aún no existe una respuesta adecuada en muchas naciones desde las dependencias de salud para algo tan importante, en tanto influirá no solo en la calidad de vida, sino también a tener en la presentación de patologías crónicas, como trastornos cardiovasculares, cerebrovasculares, neurodegenerativos, etc.
Básicamente los especialistas recomiendan seguir el decálogo del buen dormir:
 Hora fija para ir a dormir y para despertarse
 Limitar las siestas diurnas a 30-45 minutos de duración
 Evitar el alcohol excesivo 4 horas antes de ir a dormir y no fumar
 Evitar la cafeína 6 horas antes de dormir. Esto incluye café, té y muchas bebidas gaseosas, además del chocolate
 Evitar alimentos pesados, picantes, o azucarados 4 horas antes de ir a dormir. Una ligera cena, antes de ir a la cama es aceptable
 Hacer ejercicio de forma regular, pero no justo antes de ir a dormir
 Usar un sistema de descanso cómodo
 Encontrar una temperatura confortable para dormir y tener la habitación bien ventilada
 Bloquear todo ruido que distraiga y eliminar la luz tanto como sea posible
 Reservar la cama para el sueño y el sexo. No utilizar la cama como oficina, lugar de trabajo o recreación
Se estima que hasta el 45% de la población mundial tiene algún problema relacionado con el sueño que afecta su buen dormir y su descanso, ante lo que promover la prevención, la educación y una mejor comprensión de estos trastornos es vital para todos.
La campaña Dormir bien es un sueño alcanzable, prioriza en todo sentido que volver a tener un descanso reparador no es algo ni remotamente imposible y que muy por el contrario, los especialistas entienden que si bien los trastornos de sueño tienen una alta prevalencia, son tratables en la mayoría de los casos.
En la casi totalidad de los países de Occidente, un 30% de la población consultará en algún momento de su vida por un trastorno de sueño (insomnio, síndrome de apnea del sueño, piernas inquietas, sonambulismo, etc), y aún no existe una respuesta adecuada en muchas naciones desde las dependencias de salud para algo tan importante, en tanto influirá no solo en la calidad de vida, sino también a tener en la presentación de patologías crónicas, como trastornos cardiovasculares, cerebrovasculares, neurodegenerativos, etc.
Básicamente los especialistas recomiendan seguir el decálogo del buen dormir:
 Hora fija para ir a dormir y para despertarse
 Limitar las siestas diurnas a 30-45 minutos de duración
 Evitar el alcohol excesivo 4 horas antes de ir a dormir y no fumar
 Evitar la cafeína 6 horas antes de dormir. Esto incluye café, té y muchas bebidas gaseosas, además del chocolate
 Evitar alimentos pesados, picantes, o azucarados 4 horas antes de ir a dormir. Una ligera cena, antes de ir a la cama es aceptable
 Hacer ejercicio de forma regular, pero no justo antes de ir a dormir
 Usar un sistema de descanso cómodo
 Encontrar una temperatura confortable para dormir y tener la habitación bien ventilada
 Bloquear todo ruido que distraiga y eliminar la luz tanto como sea posible
 Reservar la cama para el sueño y el sexo. No utilizar la cama como oficina, lugar de trabajo o recreación











