Testeos rápidos de VIH en la Ciudad de Buenos Aires
  
Con más de 20 puntos habilitados en diferentes barrios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Ministerio de Salud porteño y organizaciones de referencia ofrecen la posibilidad de realizarse un testeo rápido para detectar el virus de VIH con el objetivo de incrementar el diagnóstico y de llegar más temprano a tratar la enfermedad.

"En 2013 decidimos implementar el testeo rápido de VIH como una estrategia para llegar a un diagnóstico temprano. Lo que veíamos era que el 38% de los diagnósticos se realizaban cuando la persona ya presentaba síntomas", indicó Florencia Flax Marcó, directora general de Planificación Operativa del Ministerio de Salud porteño.

Durante ese año, desde el Ministerio comenzaron a entregar tiras reactivas en diferentes hospitales y centros de salud donde se armaron dispositivos específicos llamados Centros de Prevención Asesoramiento y Diagnóstico del VIH-sida (CePAD).

"El 1 de diciembre de 2013, para el Día Mundial de Lucha contra el Sida, pusimos un puesto en el Obelisco, llevamos tiras y pensamos que nadie se iba a animar. El testeo fue un éxito absoluto, nos quedamos sin tiras y comenzamos a derivar a los centros que ya estaban funcionando. Desde entonces, cada día son más las personas que se acercan", indicó Flax Marcó.

Además de los espacios fijos, el Ministerio incorporó también unidades móviles que una vez por mes se instalan en espacios públicos donde ofrecen el testeo rápido.

"Lo que vemos en estos casos es que existe un perfil que nosotros detectamos que no se acercaría a un hospital o incluso a su obra social a pedir el test, pero como esto es 'al paso', se animan, se sacan la duda. También es importante la población que diagnosticamos que, si se tuviera que acercar a un laboratorio, no lo haría, o no iría a buscar el resultado", sostuvo.

Con el mismo espíritu, la Fundación Huésped inauguró en octubre último un centro de testeo rápido, donde se realizaron desde entonces 837 pruebas, con más de 46 positivos.

"A lo largo de estos años la Fundación ha logrado instalarse en el imaginario de la gente. Quien se acerca aquí lo hace tranquilo, sabiendo que nadie lo va a cuestionar y que va a estar acompañado", indicó por su parte Mar Lucas, coordinadora de Proyectos de Huésped.

Si bien a nivel general hay algunos datos que están procesando, en Huésped, el 34 por ciento de la población que se acercó a testearse es la primera vez que lo hacía.

"Lo que observamos de las personas cuyos resultados dieron positivo, es que muchos de ellos habían pasado por el sistema de salud con alguna enfermedad marcadora y nadie les había indicado efectuarse el test, ni el rápido ni el convencional", indicó Lucas.

Y continuó: "Esto nos demuestra que existen preguntas que siguen sin hacerse desde el propio sistema de salud. Esto no es por un tema médico, actualmente Argentina ofrece un tratamiento con un sólo comprimido desde el momento del diagnóstico, sino por el peso social que todavía tiene vivir con el virus".

La importancia del diagnóstico temprano es vital por dos aspectos: "El primero es que el virus, además de 'atacar' el sistema inmunológico produce una inflamación de todas las células, entonces cuanto antes se comienza el tratamiento menor es el daño que el virus hace", afirmó Lucas.

Y añadió que "en segundo lugar cuando una persona es diagnosticada y comienza el tratamiento, su carga viral disminuye y con esto sus posibilidades de transmitir el virus".

Tanto en los espacios públicos como en las organizaciones como Huésped o Nexo, el testeo rápido comienza con una consultoría y orientación, rápida también (no más de 15 minutos). Luego la persona se realiza el pinchazo y en quince minutos tiene el resultado.

"No hay falsos negativos, a menos que se trate del periodo de ventana que es cada vez menor. Es decir, existe un tiempo entre que la persona entró en contacto con el virus y el reactivo lo detecta que al principio de la epidemia era de tres meses y que hoy, dependiendo de la generación del test, se reduce a 15 días como mucho", explicó Lucas.

En el caso de dar positivo, la persona es asesorada y contenida. En Huésped le brindan ya la orden para hacerse un análisis en laboratorio para examinar la carga viral y los CD4 (que permiten detectar el estadío de la enfermedad) que va a ser la ratificación del diagnóstico; en los otros espacios, se le consigue una consulta con algún servicio de infectología del centro de salud de referencia.

"Todo el proceso demora unos 30 minutos, a menos que el resultado sea positivo; en ese caso, se le brinda el tiempo de contención que la persona necesita. Cuando llega al turno en el hospital el servicio de infectología ya la está esperando con el conocimiento de que tiene un test rápido realizado", describió Flax Marcó.

Según el último boletín epidemiológico de la Ciudad de Buenos Aires (2015), desde enero de 2003 hasta diciembre de 2014, 16.109 de personas fueron diagnosticadas con VIH, en tanto el porcentaje de diagnósticos tardíos descendió del 42% en 2003 al 31% en 2014.

Durante 2014 se confirmaron 1802 diagnósticos con una prevalencia del 1,75% y la distribución de testeos rápidos llegó a 25.200.

En Argentina se estima que unas 126 mil personas viven con VIH, de las cuales el 30% todavía lo desconoce.


Referencia: TELAM
 
Director, Propietario y Periodístico:
D. M. B.
Urquiz 123 (3000)
Santa Fe - Santa Fe.
Tel.: 15 3287-8912
Seguinos
BUENA PRAXIS. El Periódico de la Salud © Todos los derechos reservados. web design Triliton