Brasil: Alertan de un brote de fiebre amarilla
  
El destino que muchos argentinos eligen para ir de vacaciones comenzará una campaña de vacunación para evitar brotes.
En época de vacaciones, muchos turistas argentinos eligen al país vecino para ir a pasar sus días libres a la playa. Sin embargo, no es todo carnaval en Brasil: el Ministerio de Salud anunció que iniciarán una campaña de vacunación fraccionada contra la fiebre amarilla para evitar un brote epidémico.

La campaña se realizará entre febrero y marzo en tres estados de Brasil: San Pablo, Río de Janeiro y Bahía. La campaña de vacunación pretende alcanzar a 19,7 millones de personas en los tres estados, de las cuales 15 millones recibirán dosis fraccionadas (0,1 ml)y otras 4,7 millones dosis estándar (0,5 ml).

"Estamos alertando, no estamos alarmando. El Estado tiene la situación bajo absoluto control. No va haber epidemia o pandemia, pero infelizmente vamos a tener más casos", sostuvo el secretario de Salud del estado de San Pablo, Dr. David Uip.

La coordinadora del Programa Nacional de Inmunización del Ministerio de Salud, Carla Domingues, explicó que la fiebre amarilla suele contraerse entre los meses de diciembre y mayo. "Para evitar que eso ocurra, estamos anticipando la vacunación porque el virus entró en área con elevado densidad de población", declaró Domingues.

La campaña, oficialmente, comenzará en San Pablo el 3 de febrero. Sin embargo, ante el aumento de los casos, miles de ciudadanos de diferentes ciudades hicieron filas en los últimos días para recibir la vacuna contra la fiebre amarilla.

Por otra parte, la OMS recomienda la vacunación contra la fiebre amarilla para los viajeros internacionales que visitan esas áreas en los estados de Río de Janeiro y San Pablo.

En los últimos meses 144 brasileños fallecieron de fiebre amarilla y 448 personas contrajeron la enfermedad.



¿Qué es?
La fiebre amarilla viral se transmite por la picadura de un tipo de mosquito, que previamente ha picado a una persona enferma y de esa manera se ha infectado. No todos los mosquitos contagian la fiebre amarilla, sólo aquellos que previamente han picado a un individuo enfermo. Se llama fiebre amarilla, porque a muchos de los que se enferman se les pone la piel de ese color.

¿Cómo se transmite?
El contagio solo se produce por la picadura de los mosquitos infectados (generalmente del género Aedes, los mismos que transmiten los virus de Zika, de la fiebre chikungunya y del dengue y también la transmiten los mosquitos Haemogogus. No se contagia a través del contacto personal, objetos ni por la leche materna.

Si bien cualquier persona puede contraer la fiebre amarilla, las personas de mayor edad y los niños, tienen mayor riesgo de presentar una enfermedad grave.

¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas iniciales pueden ser similares a los de una gripe e incluir fiebre, dolor de cabeza, vómito y dolores musculares. A medida que la enfermedad progresa, sangran las encías y la orina también contiene sangre. El paciente puede también sufrir ictericia (coloración amarilla de la piel).

¿Cuál es el tratamiento?
No hay un tratamiento específico para la enfermedad. Solamente se tratan los síntomas. Por eso es importante que concurra al Centro de Salud ante la sospecha. Allí le serán indicadas las medidas adecuadas a cada caso. No se automedique, porque los antifebriles de uso habitual pueden ser extremadamente perjudiciales.

¿Cómo puede prevenirse?
  • Quienes vivan en una zona de riesgo deben estar vacunados. La vacuna contra la fiebre amarilla es segura y efectiva, y se debe aplicar a los 18 meses de vida, con un refuerzo a las 11 años. Para personas mayores de 60 años debe evaluarse la necesidad real según exposición a área de riesgo. La protección de la vacuna comienza 10 días después de la aplicación.
  • Quienes vayan a viajar a una zona de riesgo deben aplicarse la vacuna (ver lugares de aplicación) 10 días antes de visitar el lugar. Además, es importante evitar las picaduras de mosquito utilizando repelentes, ropas claras y de mangas largas y pantalones largos.
  • Evitar permanecer en espacios abiertos durante las horas donde hay más mosquitos: desde el atardecer hasta entrada la noche.
  • Usar repelente en abundancia y renovar la aplicación según el tipo y concentración del mismo utilizado, especialmente si se estuvo en contacto con agua o si se transpiró en abundancia.
  • Evitar la reproducción de los mosquitos, vaciando todos los envases que acumulan agua.
.
Los monos también se enferman de fiebre amarilla, y a veces son los primeros en enfermarse. Por eso si vemos monos muertos o enfermos, debemos informar al Centro de Salud.
 
Director, Propietario y Periodístico:
D. M. B.
Urquiz 123 (3000)
Santa Fe - Santa Fe.
Tel.: 15 3287-8912
Seguinos
BUENA PRAXIS. El Periódico de la Salud © Todos los derechos reservados. web design Triliton