Aborto: Qué es, significado y concepto
  
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Se denomina aborto a la interrupción prematura del embarazo en todas sus formas, cuando el mismo no ha cumplido aún las veinte semanas de gestación. Ahora bien, cabe hacer la distinción entre dos tipos de abortos, por un lado, el espontáneo o natural y por otra parte el provocado artificialmente o también denominado aborto inducido.

Aborto Natural y Aborto Inducido
En el primer caso, el aborto espontáneo, las causas que lo provocan son únicamente naturales, entre las más frecuentes que lo provocan son problemas congénitos, es decir, anomalías genéticas que padece el feto y que desembocan justamente en la muerte fetal. También se incluyen dentro de este tipo alguna anormalidad en el tracto reproductivo o afecciones infecciosas o sistémicas que padece la madre.

Por el lado del aborto inducido consiste en la interrupción de la gestación y puede deberse a razones médicas, en este caso se lo denomina también terapéutico y entre los casos más habituales que derivan en este tipo se cuenta el embarazo ectópico, que es aquel que se produce fuera del útero materno y que ocasiona severos problemas de salud.

Entonces, en este caso la principal justificación para su razón de ser es el riesgo de vida que pueden enfrentar tanto la madre como el feto, si se continúa con el embarazo.

Y de la otra vereda nos encontramos al aborto que más polémica y controversia despierta en el mundo, que es al aborto electivo, aquel en el cual la madre decide interrumpir el embarazo porque no quiere tener ese bebé.

Una opción que mayormente lleva a la muerte de la madre
Más allá de la polémica que es mucha alrededor de este tema es importante mencionar que son millones las mujeres que en el mundo deciden practicarse un aborto y en la mayoría de esos casos lo hacen del modo más inseguro.

Porque por ejemplo hay muchos países en los que la práctica del aborto está vedada, entonces, a las mujeres no les queda más opción que la de tener que optar por una práctica clandestina, muchas veces en lugares mal acondicionados y atendidos por individuos que no son profesionales.

Tal situación por supuesto conlleva riesgos de salud muy serios para la gestante.
Pero acompañando a los riesgos físicos nos encontramos con las consecuencias psicológicas de atravesar una situación de este tipo, entre las que destacan por supuesto la depresión, una afección que asimismo puede resultar riesgosa en materia vital si no hay un acompañamiento terapéutico del hecho traumático.

Debate: porque sí, porque no
Por ello es que aquellos que abogan a favor de la legalización del aborto argumentan que sería una manera de salvarle la vida a millones de mujeres que en el mundo se someten a esta práctica en paupérrimas condiciones. Una de las situaciones más frecuentes que desencadenan la decisión de una mujer de practicarse un aborto a como dé lugar son aquellos embarazos que devienen de una violación.

Mientras tanto, por el lado de quienes rechazan de plano la opción por el aborto, el argumento que prevalece es que a partir de la unión entre óvulo y espermatozoide estamos frente a un ser humano con lo cual se estaría atentando directamente contra sus derechos como tal.

Cabe destacarse que en algunos países la práctica del aborto se encuentra habilitada jurídicamente sin reservas mientras que en otros se interponen reservas dependiendo del caso y en otras naciones directamente está prohibido bajo cualquier circunstancia.

La postura de la Iglesia
La Iglesia Católica está absolutamente en contra de cualquier práctica abortiva y el argumento es similar al que proponen quienes se profesan en contra y es que principalmente considera primordial que la vida humana sea protegida y respetada inmediatamente después de la concepción, que es cuando ellos justamente consideran que inicia la vida humana.

Para la Iglesia quien comete un aborto o asiste al mismo estará cometiendo al mismo tiempo un pecado grave. Por caso es que la Iglesia ejerce una fuerte presión en aquellos países eminentemente católicos para que del debate resulte la decisión de no legalizar el aborto.

Definición de Aborto Inducido

Un aborto es el procedimiento por medio del cual se interrumpe un embarazo. Este puede ser de dos tipos, natural o espontáneo, e inducido.

Es posible que durante el embarazo ocurra la pérdida espontanea del bebe. Esto ocurre incluso en mujeres que no sabían que estaban embarazadas. Por lo general este hecho es más frecuente en el primer trimestre del embarazo y se debe principalmente a defectos del feto, como es el caso de las malformaciones congénitas.

Existe una condición que puede llevar a que el aborto se presenta en el segundo trimestre y es la insuficiencia cervical, trastorno en el que el cuello uterino cede ante el peso del contenido del útero dilatándose espontáneamente con la pérdida del feto.

Además de estas situaciones en las que el embarazo se interrumpe de forma espontánea, es posible que éste se cese de forma voluntaria. Hecho conocido como aborto inducido

Razones que llevan a tomar la decisión de efectuar un aborto inducido
El aborto inducido se ha llevado a cabo por años por indicación médica. Lo cual es perfectamente legal y se efectúa de forma tal que no hayan consecuencias ni complicaciones para la madre. Las principales causas de este aborto son las malformaciones fetales graves que hacen que el niño tenga pocas probabilidades de sobrevivir al nacer o la presencia de enfermedades maternas que puedan agravarse con el embarazo poniendo la vida de la madre en peligro.

Muchas mujeres optan por efectuarse abortos inducidos de forma ilegal. Esto ocurre cuando el embarazo se interrumpe por razones que no están relacionadas con la salud de la madre, sino por motivos como el hecho de no desear el embarazo.

Esto ocurre cuando la mujer fue violada, al fallar el método anticonceptivo, cuando no hay las condiciones socioeconómicas para tener un hijo o incluso por el rechazo de la familia y el entorno cuando el embarazo ocurre en una adolescente o en una mujer soltera.

En algunos países la violación es una causa legal para efectuar un aborto. Recientemente en Brasil se presentó un gran número de recién nacidos con una malformación conocida como microcefalia a consecuencia de la infección por el virus Zika en mujeres embarazadas, lo que ha llevado a considerar esta infección como una causa legal de aborto en ese país.

Cómo debe llevarse a cabo un aborto inducido
Este tipo de aborto debe efectuarse por un especialista, con una indicación clara. Las técnicas empleadas varían según el tiempo de embarazo.

Uso de medicamentos. En las primeras nueve semanas de embarazo el principal método empleado es la administración de hormonas que son capaces de inducir la aparición de contracciones uterinas. Esto genera un aumento de la presión dentro del útero que lleva a que se expulse su contenido ocurriendo así un aborto similar al aborto espontáneo.

Aspiración uterina. Puede emplearse en embarazos de hasta 4 meses. Es una técnica invasiva llevada a cabo bajo anestesia. Consiste en la introducción de una cánula por la vagina para llegar al útero, una vez allí se aplica succión aspirando el contenido uterino, tras lo cual se realiza un curetaje para eliminar los restos.

Aborto por inducción. Este procedimiento se efectúa en embarazos hasta el segundo trimestre. Consiste en la administración de sustancias que inducen el trabajo de parto al tiempo que se llevan a cabo procedimientos para dilatar el cuello uterino.

Estos procedimientos se efectúan en el primer o segundo trimestre del embarazo. En la mayoría de los países los abortos en el tercer trimestre son ilegales, ya que en esta fase se considera que el feto es viable, es decir, es capaz de sobrevivir si llega a nacer.

El aborto inducido ilegal puede ocasionar la muerte de la madre
Muchas veces los aspectos éticos, religiosos así como los prejuicios y temores llevan a muchas mujeres a buscar vías clandestinas para interrumpir un embarazo no deseado. Esto puede acabar no solo con la vida del feto sino también con la de la madre.

Por lo general los abortos clandestinos son realizados por personal no capacitado, en lugares no aptos para un procedimiento que constituye una cirugía. Esto aumenta el riesgo de que ocurran complicaciones, principalmente la perforación del útero, desgarros del canal del parto, hemorragias e infecciones, las mujeres que sobreviven a estas situaciones pueden quedar estériles de forma permanente. Todas estas complicaciones pueden ocasionar la muerte si no son manejadas adecuadamente.

Otra modalidad de aborto inducido es efectuado por la misma mujer, al introducirse objetos o sustancias tóxicas dentro de la vagina. Esto conlleva el mismo riesgo del aborto clandestino. Estas suelen ser medidas desesperadas que lejos de solucionar el problema lo agravan aun más.

Las estadísticas de la Organización Mundial para la Salud (OMS) muestran que a nivel mundial casi 46 millones de mujeres se someten cada año a un aborto inducido, llevando a la muerte a 47.000 de ellas.


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