Científicos israelíes aseguran que en pocas semanas tendrán la vacuna contra el COVID-19
Los científicos de todas partes del mundo están trabajando incansablemente día y noche para lograr una vacuna que ponga fin a este nuevo brote de coronavirus que se sigue expandiendo, y que ya alcanzó a casi 60 países.
Al parecer, esta búsqueda puede estar llegando a un buen puerto. Un grupo de científicos israelíes lograron un avance clave que permitiría desarrollar, "durante las próximas 8 o 10 semanas", la vacuna contra el nuevo virus que tienen en vilo al mundo.
Después de 4 años de investigación financiada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de Israel, los especialistas de MIGAL (Instituto de Investigación de Galilea) crearon un antídoto efectivo contra el virus de la bronquitis infecciosa por coronavirus aviar (IBV), que causa una enfermedad bronquial que afecta a las aves de corral y que se adaptará pronto y creará una vacuna humana contra el COVID-19.
«Felicitaciones a MIGAL por este emocionante avance. Estoy seguro de que habrá un progreso más rápido, lo que nos permitirá proporcionar una respuesta necesaria a la grave amenaza global COVID-19», indicó Ofir Akunis, ministro de Ciencia y Tecnología de Israel en un comunicado, quien, además, dio instrucciones para acelerar todos los procesos de aprobación con el fin de que llegue al mercado lo más rápido posible.
Con el objetivo de contrarrestar el coronavirus que se volvió una epidemia y amenaza con transformarse en pandemia (la OMS advirtió esta semana al respecto), MIGAL realizó los ajustes genéticos necesarios para adaptar la vacuna a COVID-19, la cepa humana de coronavirus, y están trabajando para lograr las pruebas 'in vivo', para que les permitan dar inicio a la producción.
De la investigación realizada descubrieron que el coronavirus de las aves de corral tiene una gran similitud genética con el humano, y que utiliza el mismo mecanismo de infección, un hecho que aumenta la probabilidad de lograr un antídoto humano eficaz en un corto período de tiempo.
«Nuestro objetivo es producir la vacuna durante las próximas 8-10 semanas y lograr la aprobación de seguridad en 90 días. Esta será oral, haciéndola particularmente accesible al público en general. Actualmente estamos en intensas conversaciones con socios potenciales que pueden ayudar a acelerar la fase de ensayos en humanos y acelerar la finalización del desarrollo del producto final y las actividades reguladoras», explicó David Zigdon, CEO del Instituto de Investigación MIGAL.
Al parecer, esta búsqueda puede estar llegando a un buen puerto. Un grupo de científicos israelíes lograron un avance clave que permitiría desarrollar, "durante las próximas 8 o 10 semanas", la vacuna contra el nuevo virus que tienen en vilo al mundo.
Después de 4 años de investigación financiada por el Ministerio de Ciencia y Tecnología de Israel, los especialistas de MIGAL (Instituto de Investigación de Galilea) crearon un antídoto efectivo contra el virus de la bronquitis infecciosa por coronavirus aviar (IBV), que causa una enfermedad bronquial que afecta a las aves de corral y que se adaptará pronto y creará una vacuna humana contra el COVID-19.
«Felicitaciones a MIGAL por este emocionante avance. Estoy seguro de que habrá un progreso más rápido, lo que nos permitirá proporcionar una respuesta necesaria a la grave amenaza global COVID-19», indicó Ofir Akunis, ministro de Ciencia y Tecnología de Israel en un comunicado, quien, además, dio instrucciones para acelerar todos los procesos de aprobación con el fin de que llegue al mercado lo más rápido posible.
Con el objetivo de contrarrestar el coronavirus que se volvió una epidemia y amenaza con transformarse en pandemia (la OMS advirtió esta semana al respecto), MIGAL realizó los ajustes genéticos necesarios para adaptar la vacuna a COVID-19, la cepa humana de coronavirus, y están trabajando para lograr las pruebas 'in vivo', para que les permitan dar inicio a la producción.
De la investigación realizada descubrieron que el coronavirus de las aves de corral tiene una gran similitud genética con el humano, y que utiliza el mismo mecanismo de infección, un hecho que aumenta la probabilidad de lograr un antídoto humano eficaz en un corto período de tiempo.
«Nuestro objetivo es producir la vacuna durante las próximas 8-10 semanas y lograr la aprobación de seguridad en 90 días. Esta será oral, haciéndola particularmente accesible al público en general. Actualmente estamos en intensas conversaciones con socios potenciales que pueden ayudar a acelerar la fase de ensayos en humanos y acelerar la finalización del desarrollo del producto final y las actividades reguladoras», explicó David Zigdon, CEO del Instituto de Investigación MIGAL.