Concluyó la 2da. Edición del Simposio Internacional enfocado en Neurociencias y Bienestar
La Dra. Teresa Torralva, presidente de Fundación INECO, dijo que «en estos tiempos tan complejos alcanzar el bienestar ocupa sin duda alguna un lugar central en el campo de la salud», dando apertura al 2° Simposio Virtual Internacional sobre Neurociencias y Bienestar, que llevó a cabo INECO y que contó con la participación de más de 5.500 inscriptos de diferentes partes del mundo.
Al comienzo de la jornada, Barry Schwartz, Profesor de Swarthmore College, reflexionó sobre los grandes efectos de la pandemia y afirmó que, si bien no sabemos que trae el mañana, sabemos que tenemos que prestarle atención a la resiliencia. Al respecto, Leticia Daguerre de la Universidad Católica de Uruguay explicó que para superar un hecho traumático existen facilitadores que nos ayudan a enfrentar las adversidades como: la expresión emocional, poder compartir con el otro la narrativa de la vivencia, el apoyo social y profundizar sobre el tema.
Asimismo, Craig Ritchie, director de Brain Health Scotland, presentó su iniciativa para proporcionar servicios clínicos para personas en etapas previas a la demencia y afirmó que «en un 40% de los casos el Alzhéimer se puede prevenir, si se pudieran regular los factores de riesgo como los genéticos o los vinculados al estilo de vida, por ejemplo».
Políticas Públicas
Fernando Torrente, director del Instituto de Neurociencias y Políticas Públicas de la Fundación INECO y moderador de la Mesa de Políticas Públicas, introdujo la temática afirmando que «las emociones, la salud mental, las relaciones entre las personas y los vínculos, no formaban parte de la agenda de los estados ni de la discusión pública y que esto ha ido cambiando en los últimos años».
A continuación, Rosa Surinach de ONUHabitat introdujo el concepto de resiliencia urbana y se refirió al modo en que el bienestar ha pasado del ámbito privado al ámbito público: «Hubo una consecuencia muy muy grande luego de la pandemia, que originó la necesidad de tener en cuenta la salud integral de la persona que incluye la salud mental. Las ciudades han empezado a crear espacios dentro de la ciudad, redes de conexiones, para que haya un cuidado de las personas y de las comunidades de forma integral».
Por otra parte, el reconocido investigador Andrés Malamud profundizó sobre la política exterior y la importancia que tiene para las sociedades para escalar en el mercado, ganar reputación, por seguridad, como escudo y para ganar audiencia.
Educación
Florencia Salvarezza, directora del Instituto de Neurociencias y Educación de Fundación INECO, planteó a la mesa la pregunta: «¿Cómo hacemos para atravesar todo esto que venimos conversando, todos estos temas entre el aprendizaje basado en trabajar con la creatividad, con las emociones, con el bienestar en el aula, la tecnología?».
Al respecto, Rafael Bisquerra de la Red Internacional de Educación Emocional y Bienestar afirmó que eso se puede conseguir con educación emocional. «Ninguna de las áreas académicas contiene de forma eficiente a la prevención de ansiedad, estrés, depresión, consumo de sustancias, suicidio, violencia, lo cual son manifestaciones del analfabetismo emocional», aseguró el orador.
Por su parte, Andrés Delich de OEI en Madrid, profundizó en que existen ciertas habilidades para la educación de este siglo como el aprendizaje, la adaptabilidad y el manejo de la frustración, la capacidad de creatividad, la solución de problemas, la toma de decisiones y la formulación del pensamiento crítico, en las que hay que hacer hincapié.
Para finalizar la mesa, Guillermina Tiramonti de FLACSO se preguntó ¿Qué escuela necesitamos para abordar y para formar a las nuevas generaciones? y concluyó que «Una escuela tecnológica es una escuela en la cual los chicos aprenden mientras hacen y son partícipes del proceso de adquisición de su propio conocimiento. Estas nuevas formas de acercarse al conocimiento, ayudan al desarrollo de habilidades que los chicos necesitarán en un mundo que tendrán que descubrir permanentemente y reubicarse».
Organizaciones
Con la moderación de Enrique Azuaga, Pilar Jericó de la Consultora BeUp dio inició a la mesa donde aseguró que después de esta pandemia nos encontramos con situaciones laborales diferentes a las anteriores y que la COVID-19 es un momento histórico en el que las empresas tienen que poner foco, porque lo más importante de las organizaciones es precisamente el talento y las personas.
A continuación, María Roca de Ineco Organizaciones afirmó: «Los problemas de la salud mental como la falta de bienestar pueden impactar en los negocios: en la productividad de un colaborador y de la empresa, en la rotación y en el ausentismo», y concluyó que los mapeos de salud emocional son fundamentales para saber cuáles son las poblaciones dentro de una organización que requieren una mayor intervención. «Conocer el estado en el que está la Salud Mental de nuestros colaboradores, va a ser fundamental para generar intervenciones que estén especialmente diseñadas y dirigidas a las poblaciones que más lo necesitan».
Para concluir, Emilia Montero de Great Place to Work compartió con el auditorio que los líderes de una organización deben ayudar a la gente a construir propósito, relaciones positivas y a encontrar estabilidad, pensando al bienestar como la calidad de vida en el trabajo de una manera integral.
Como cierre del evento, Richard Davidson, Profesor, Investigador y Fundador del Center for Healthy Minds, estableció que, si entrenamos nuestra mente para cultivar cualidades positivas, nuestro cerebro realmente puede cambiar y permitir que estas cualidades perduren en el tiempo, y aseguró que el bienestar se considera una habilidad que se puede aprender. Sus principales pilares son: la toma de conciencia, las interacciones sociales sanas, la curiosidad por entender y el sentido del propósito.
«El objetivo de este Simposio era brindar, en este año tan difícil, un momento gratuito a la comunidad donde se puedan escuchar a los referentes del mundo en lo relacionado a educación, al trabajo y a políticas públicas; y que, a partir de eso podamos tener un momento para pensar y cumplir con el objetivo de brindar un mayor bienestar a la comunidad, desde las neurociencias», concluyó el Dr. Julián Bustin, coordinador científico del Simposio, junto con la Lic. María Fernanda Giralt Font.