Glaucoma: el diagnóstico temprano es fundamental para preservar la visión
12 de marzo - Día Mundial del Glaucoma, para crear conciencia sobre la prevención de la ceguera y la necesidad de hacerse chequeos oftalmológicos periódicos para evaluar el nervio óptico.
El glaucoma es la segunda causa de ceguera irreversible en el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), alrededor de 80 millones de personas padecen de esta enfermedad durante el 2020 y se espera que esta cifra aumente a más de 111 millones para 2040. Especialistas de DIM CENTROS DE SALUD explican la importancia de hacerse exámenes oculares regulares para un diagnóstico adecuado y para prevenir daños en el futuro.
Actualmente, no existe una cura para el glaucoma; sin embargo, mediante un diagnóstico y tratamiento temprano, la enfermedad se puede controlar antes de que ocurra la pérdida de la visión o la ceguera. La mayoría de las personas no se dan cuenta de la gravedad de esta afección.
«El glaucoma es una condición dada por el daño en el nervio óptico, que es el cable fundamental que lleva las imágenes del ojo hasta el cerebro. La mayoría de las veces éste se daña por un aumento de la presión del ojo o por una falta de irrigación sanguínea adecuada», explicó el Dr. Nicolás Polisky, oftalmólogo (MP 334555 // MN 133050), de DIM CENTROS DE SALUD
El especialista indicó que en muchas ocasiones la enfermedad comienza sin presentar ningún síntoma, por eso es fundamental realizar controles y estudios oftalmológicos regulares para detectar el glaucoma a tiempo. «La medición de presión intraocular es indispensable para detectarlo de forma temprana. Aunque muchas veces la presión intraocular puede elevarse de forma espontánea».
Los síntomas más comunes de presión intraocular elevada son:
- Halos alrededor de las luces.
- Dolor severo de la frente o el ojo.
- Náuseas y vómitos.
- Ojo rojo y visión borrosa.
- Disminución de la agudeza visual repentinas.
- Alteración del campo visual: "chocarse con las cosas por no verlas".
- Dolor en los ojos.