¿Qué es el Síndrome de Pensamiento Acelerado?
El Síndrome del Pensamiento Acelerado (PAS) es una alteración identificada por el psiquiatra Augusto Cury. En ella, la mente se llena de pensamientos, lo que provoca dificultad para concentrarse, aumento de la ansiedad y deterioro de la salud física y mental.
Es importante recalcar que el problema de la SPA no es el contenido de los pensamientos, sino la rapidez y velocidad con la que se producen dentro del cerebro, según Lala Fonseca, psicóloga y especialista en burnout y ansiedad.
Normalmente, los principales objetivos de esta condición son profesionales constantemente evaluados y con un ritmo acelerado de trabajo, sin poder reducir el ritmo de trabajo ni siquiera relajarse, como periodistas, docentes y profesionales de la salud.
«El ritmo vertiginoso de los grandes centros acaba produciendo una cantidad excesiva de información, una mente hiperpensante, agitada, impaciente, con dificultades en el campo creativo y un bajo nivel de tolerancia», explicó Cristiane Duez Verzaro dos Santos, psicóloga del Support Centro Psicológico y Psicopedagógico (NAPP) del Colegio Santa Marcelina.
Además, las causas también pueden tener su origen en el consumo de drogas, como la cocaína, o como consecuencia de determinados trastornos, como:
La experta también indicó que el cansancio extremo ocurre porque los pacientes con SPA, al pensar demasiado, tienden a robar energía de la corteza cerebral, que es la capa más evolucionada del cerebro. Esta es energía que debe usarse para mantener los órganos del cuerpo. Como no es así, el cuerpo responde con un cansancio excesivo.
La experta también explica que los pacientes con SPA muestran un tipo de comportamiento en el que pierden el placer de las cosas con mucha facilidad. «Si trabajas duro para lograr algo y luego te desanimas. Entonces, buscando algo nuevo que lograr, se decide, estás en una eterna búsqueda de la felicidad y la satisfacción», dijo la experta.
«Evalúa el nivel de estrés, la cantidad de actividades diurnas, cómo es el sueño, la alimentación y cuánto vives o disfrutas la persona en tu vida. Normalmente, quien está agotado deja de ver placer en las cosas que vio antes y, por tanto, no experimenta una anestesia sana y positiva que provoque una descompresión», aclaró Lala Fonseca.
En este contexto, los profesionales que trabajan a un ritmo intenso o los estudiantes que dedican muchas horas al estudio se encuentran entre las personas con mayor riesgo de desarrollar el síndrome. La presencia de trastornos como la ansiedad, la bipolaridad y el déficit de atención también aumenta el riesgo de PAS.
Si el síndrome es causado por un trastorno de ansiedad, el tratamiento incluye fármacos antidepresivos y ansiolíticos. En el caso del trastorno bipolar, los fármacos buscan estabilizar el estado de ánimo del paciente y controlar la velocidad de los pensamientos. Finalmente, si la enfermedad de base es el TDAH, el tratamiento es con medicación para reducir la hiperactividad física y mental.
◾ Tomar descansos frecuentes de la rutina, como tomarse un tiempo para leer o disfrutar del sol sin pensar en otras actividades.
◾ Practicar actividades físicas, como el yoga, que sirven como un momento de relajación y ayudan a ralentizar la mente.
◾ Disminuir el acceso a las redes sociales, ya que, al reducir el número de accesos a internet, también se reduce la cantidad de información a la que estamos expuestos, así como las comparaciones que se realizan.
◾ Come de forma saludable, con una baja cantidad de azúcares, ya que inicialmente provocan aceleración. Además, evite la cafeína por la misma razón después del mediodía.
◾ Prioriza las relaciones personales sobre las digitales, ya que la realidad virtual aprisiona la mente y te conecta constantemente en un camino infinito.
◾ Llevar a cabo una planificación diaria en la que determinas cuáles son las prioridades y ese día ayuda a organizar tu mente para no sobrecargar tus pensamientos. Esta organización es importante para desarrollar las sensaciones de obra acabada.
◾ En el entorno laboral, se recomienda dividir las tareas día a día para no abrumar a una sola persona y reducir el peso y la autoexigencia. También es recomendable evitar largas jornadas de trabajo y tomar vacaciones de corta duración con mayor frecuencia, siempre que sea posible.
«El cuidado de la mente y el cuerpo es fundamental, así como el control de acceso a la tecnología y la información que está fácilmente disponible para nosotros. Es fácil darse un capricho, sobre todo cuando se está cansada», dijo Duez Verzaro dos Santos.
Según la especialista, además de perjudicar directamente la productividad profesional, el SPA también afecta la autoestima y trae un sentimiento de incompetencia, aumentando los riesgos del Síndrome de Burnout.
«Muchas veces, para que el cerebro se relaje, el individuo tiende a anestesiarse con sustancias nocivas para la salud, como los medicamentos de venta libre, el alcohol y la propia drogadicción, lo que provoca un daño aún mayor en la vida. del ser humano», concluyó la psicóloga.
Ref: MinhaVida
Es importante recalcar que el problema de la SPA no es el contenido de los pensamientos, sino la rapidez y velocidad con la que se producen dentro del cerebro, según Lala Fonseca, psicóloga y especialista en burnout y ansiedad.
Normalmente, los principales objetivos de esta condición son profesionales constantemente evaluados y con un ritmo acelerado de trabajo, sin poder reducir el ritmo de trabajo ni siquiera relajarse, como periodistas, docentes y profesionales de la salud.
«El ritmo vertiginoso de los grandes centros acaba produciendo una cantidad excesiva de información, una mente hiperpensante, agitada, impaciente, con dificultades en el campo creativo y un bajo nivel de tolerancia», explicó Cristiane Duez Verzaro dos Santos, psicóloga del Support Centro Psicológico y Psicopedagógico (NAPP) del Colegio Santa Marcelina.
Causas
Según Cristiane Duez Verzaro dos Santos, una de las principales causas del Síndrome de Pensamiento Acelerado es la exposición diaria al exceso de información combinado con problemas sociales, tales como: estímulos excesivos por el uso excesivo de celulares y la velocidad con la que entramos en contacto con la información cotidiano.
Además, las causas también pueden tener su origen en el consumo de drogas, como la cocaína, o como consecuencia de determinados trastornos, como:
- Ansiedad
- Bipolaridad
- Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH)
- Límite
Señales
El paciente SPA produce una superconstrucción de pensamientos, a una velocidad tan alta que acaba estresando y desgastando el cerebro. Si no puedes borrar tu mente y es difícil ralentizar tu pensamiento, el individuo termina por hacerse amigo por adelantado, según Duez Verzaro dos Santos. En este contexto, la manifestación del síndrome se da a través de los siguientes síntomas:
- Preocupación excesiva
- Inestabilidad emocional
- Inquietud
- Fatiga excesiva
- Caída del cabello
- intolerancia a la frustración
- Déficit de concentración
- Cansancio al despertar
- Dolor físico (dolor de cabeza o muscular)
- Cambios de memoria
La experta también indicó que el cansancio extremo ocurre porque los pacientes con SPA, al pensar demasiado, tienden a robar energía de la corteza cerebral, que es la capa más evolucionada del cerebro. Esta es energía que debe usarse para mantener los órganos del cuerpo. Como no es así, el cuerpo responde con un cansancio excesivo.
La experta también explica que los pacientes con SPA muestran un tipo de comportamiento en el que pierden el placer de las cosas con mucha facilidad. «Si trabajas duro para lograr algo y luego te desanimas. Entonces, buscando algo nuevo que lograr, se decide, estás en una eterna búsqueda de la felicidad y la satisfacción», dijo la experta.
Diagnóstico
El diagnóstico de Síndrome de Pensamiento Acelerado lo realizan psicólogos o psicoanalistas en base a los síntomas que presenta el paciente, así como la presencia de trastornos preexistentes y la descripción de su vida cotidiana, vivencias y vivencias.
«Evalúa el nivel de estrés, la cantidad de actividades diurnas, cómo es el sueño, la alimentación y cuánto vives o disfrutas la persona en tu vida. Normalmente, quien está agotado deja de ver placer en las cosas que vio antes y, por tanto, no experimenta una anestesia sana y positiva que provoque una descompresión», aclaró Lala Fonseca.
Factores de riesgo
Los pacientes con Síndrome de Pensamiento Acelerado a menudo sienten que las 24 horas del día no son suficientes para realizar todas las actividades rutinarias relacionadas con el trabajo, el estudio y los deberes.
En este contexto, los profesionales que trabajan a un ritmo intenso o los estudiantes que dedican muchas horas al estudio se encuentran entre las personas con mayor riesgo de desarrollar el síndrome. La presencia de trastornos como la ansiedad, la bipolaridad y el déficit de atención también aumenta el riesgo de PAS.
Tratamiento
Tras el diagnóstico, el tratamiento del síndrome debe ser guiado por un especialista. Según Duez Verzaro dos Santos, la psicoterapia es el método más adecuado para tratar el problema, capaz de controlar los pensamientos y gestionar las emociones.
Si el síndrome es causado por un trastorno de ansiedad, el tratamiento incluye fármacos antidepresivos y ansiolíticos. En el caso del trastorno bipolar, los fármacos buscan estabilizar el estado de ánimo del paciente y controlar la velocidad de los pensamientos. Finalmente, si la enfermedad de base es el TDAH, el tratamiento es con medicación para reducir la hiperactividad física y mental.
Coexistencia (Pronóstico)
Adoptar hábitos de vida más saludables es fundamental para los pacientes con Síndrome de Pensamiento Acelerado. Según Lala Fonseca y Cristiane Duez Verzaro dos Santos, el cambio se puede hacer de la siguiente manera:
◾ Tomar descansos frecuentes de la rutina, como tomarse un tiempo para leer o disfrutar del sol sin pensar en otras actividades.
◾ Practicar actividades físicas, como el yoga, que sirven como un momento de relajación y ayudan a ralentizar la mente.
◾ Disminuir el acceso a las redes sociales, ya que, al reducir el número de accesos a internet, también se reduce la cantidad de información a la que estamos expuestos, así como las comparaciones que se realizan.
◾ Come de forma saludable, con una baja cantidad de azúcares, ya que inicialmente provocan aceleración. Además, evite la cafeína por la misma razón después del mediodía.
◾ Prioriza las relaciones personales sobre las digitales, ya que la realidad virtual aprisiona la mente y te conecta constantemente en un camino infinito.
◾ Llevar a cabo una planificación diaria en la que determinas cuáles son las prioridades y ese día ayuda a organizar tu mente para no sobrecargar tus pensamientos. Esta organización es importante para desarrollar las sensaciones de obra acabada.
◾ En el entorno laboral, se recomienda dividir las tareas día a día para no abrumar a una sola persona y reducir el peso y la autoexigencia. También es recomendable evitar largas jornadas de trabajo y tomar vacaciones de corta duración con mayor frecuencia, siempre que sea posible.
«El cuidado de la mente y el cuerpo es fundamental, así como el control de acceso a la tecnología y la información que está fácilmente disponible para nosotros. Es fácil darse un capricho, sobre todo cuando se está cansada», dijo Duez Verzaro dos Santos.
Posibles complicaciones
Si no se trata adecuadamente, el Síndrome de Pensamiento Acelerado puede perjudicar el trabajo, el estudio, las relaciones interpersonales y especialmente la salud física. «Después de 2 meses de agotamiento, ya tenemos la posibilidad de compromiso de estómago, hígado, intestinos y piel, además de riesgos asociados a trastornos emocionales, como el suicidio», dijo Fonseca.
Según la especialista, además de perjudicar directamente la productividad profesional, el SPA también afecta la autoestima y trae un sentimiento de incompetencia, aumentando los riesgos del Síndrome de Burnout.
«Muchas veces, para que el cerebro se relaje, el individuo tiende a anestesiarse con sustancias nocivas para la salud, como los medicamentos de venta libre, el alcohol y la propia drogadicción, lo que provoca un daño aún mayor en la vida. del ser humano», concluyó la psicóloga.
Ref: MinhaVida